Pinzas

Una pinza industrial es un dispositivo mecánico diseñado para agarrar o sujetar un objeto con seguridad. Las pinzas son cruciales en muchas operaciones industriales y se utilizan en todo tipo de aplicaciones, desde líneas de montaje automatizadas hasta brazos robóticos. El diseño de una pinza industrial consiste normalmente en dos o más dedos unidos a una base. Los dedos de la pinza se mueven al unísono para coger, sujetar y soltar una pieza de trabajo o una herramienta. Algunas pinzas industriales tienen dedos flexibles que les permiten adaptarse a la forma de un objeto.

Los tres diseños más comunes de una pinza son los paralelos, los de tres dedos y los angulares. Las pinzas paralelas son dispositivos de dos dedos que se utilizan para agarrar objetos que se colocan entre ellos. Para sujetar un objeto, utilizan dos dedos que se mueven en paralelo, empujando contra él. 

Las pinzas de tres dedos están diseñadas para proporcionar una sujeción más segura de un objeto sujetando la pieza de trabajo en el centro y teniendo los tres dedos desplazados 120°. Las pinzas angulares están diseñadas para sujetar objetos en ángulo, lo que les permite asegurar objetos de diferentes formas y tamaños. Estas pinzas tienen dos o tres dedos que se mueven en un movimiento curvo y pueden ajustarse para adaptarse al objeto.

Las pinzas se clasifican en tres tipos: hidráulicas, eléctricas y neumáticas. Cada tipo de pinza ofrece sus propias ventajas e inconvenientes, lo que las hace adecuadas para distintas aplicaciones.

Una pinza neumática es un dispositivo mecánico utilizado para agarrar y sujetar objetos utilizando aire a presión. Consta de un cilindro y dos pistones, uno de los cuales está conectado a un suministro de aire y el otro al objeto que se va a sujetar. La pinza funciona haciendo pasar aire a través de los pistones, que se expanden y contraen para aplicar una fuerza de agarre sobre el objeto. Dado que los mecanismos de agarre neumáticos carecen de motores y engranajes, resulta sencillo convertir la potencia de un sistema de pistón/cilindro en fuerza de agarre. Dado que la mayoría de las instalaciones de fabricación ya tienen acceso a aire comprimido, la implantación de pinzas neumáticas es sencilla y rentable. Una de las principales ventajas de las pinzas neumáticas es que proporcionan un alto nivel de fuerza de agarre en un paquete pequeño, ligero y barato.

Las pinzas hidráulicas constan de dos partes principales: un cilindro y un pistón. El pistón está unido a un sistema de accionamiento, como un motor, que produce el fluido a presión necesario para mover el pistón. El cilindro contiene una serie de canales y válvulas que controlan el flujo del fluido presurizado. Cuando se activa el sistema de accionamiento, el fluido presurizado se introduce en el cilindro, empujando el pistón hacia fuera. Los dedos de la pinza se cierran y agarran el objeto a medida que el pistón se desplaza hacia fuera. Como las pinzas hidráulicas tienen pistones y piezas engrasadas, requieren mucho más mantenimiento que sus homólogas servoeléctricas y neumáticas. El mantenimiento de las pinzas hidráulicas también es complicado, y pueden ser necesarios técnicos cualificados para mantener el aceite, la bomba y el depósito.

Una pinza eléctrica es un dispositivo que utiliza energía eléctrica para accionar un mecanismo de agarre. Una pinza eléctrica consta de un motor, un sistema de control eléctrico y un mecanismo de agarre. El sistema de control eléctrico de una pinza eléctrica consta de un codificador, un controlador y una fuente de alimentación. El codificador mide la posición de la pinza y proporciona información al controlador, que interpreta los datos y envía las señales necesarias al motor, que mueve la pinza. Las operaciones de recogida y colocación, ensamblaje, manipulación automatizada de materiales y carga y descarga de máquinas son ejemplos de aplicación de las pinzas eléctricas. Las pinzas eléctricas superan a las hidráulicas y neumáticas por su mayor rango de movimiento y fuerza de agarre. Son más fáciles de integrar en sistemas automatizados, más precisas y más rápidas que los otros dos tipos, lo que las hace ideales para aplicaciones que requieren gran precisión y repetibilidad.

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